El porrazo de mi vida
Sin más ni menos, el día 9 de Noviembre caí al hospital. A las 21.00 estaba entrando en la Sala de Emergencias y los exámenes salieron pésimo: mi glucosa y presión por las nubes. Hice mi debut. Alrededor de las 02.00am del día 10 estaba siendo ingresado a la UCI del Hospital Regional de Concepción y era sometido a una inserción de vías en mi cuello para poder pasar litros y litros de suero, insulina y medicamentos. El diagnóstico fue una pancreatitis grave que nunca se manifestó con los dolores que debió hacerlo. TAC de abdomen, ecografías, exámenes de sangre todas las mañanas y régimen cero fueron la tónica de algunos días. Lo peor es que no podía tomar ni siquiera una gota de agua. Estuve toda esa semana sin comer nada en la UCI. Había que lograr desinflamar un páncreas que había colapsado por que el hígado necesitaba procesar mucho alcohol y grasas. No recuerdo si el Jueves o el Viernes me dieron el alta para pasar a la UTI en donde estuve 6 días en observación. Mis niveles de ...